Haber elegido para la foto de cabecera un fragmento de una obra mundialmente reconocida, merece una reseña de su genial creadora.
Se trata de “La habitación
de los espejos infinitos” de la polifacética artista visual Yayoi Kusama (Matsumoto, Japón 1929). Un espacio forrado a base de espejos que forman un cubo con un pavimento en forma de lámina de agua, creado con otro espejo y cientos de bombillas led suspendidas del techo.
Con su edad, todavía viva, ha
recorrido tres periodos artísticos; arte contemporáneo, pop y el minimalismo. El
juego con las luces, lunares, globos y espejos, acompañan a sus particulares delirios mentales. Todo ello produce en su creación un singular resultado reconocido
como único en todo el mundo. Numerosas distinciones y especialmente, La orden de las Artes
y Letras Francesas, en 2003 y el Praemium Imperiale Japonés, en 2006, en la categoría
de pintura, adornan su trayectoria artística.
La frase de Yayoi Kusama:
“Los puntos son
sólidos e infinitos. Son una forma de vida. Sol, luna, estrellas, son cientos de
millones de puntos. Cada ser humano es también un punto. Los puntos no pueden
existir por sí mismos, solo pueden existir cuando se reúnen unos con otros.
Admiro completamente su "infinitud" y estoy profundamente conmovida
por la grandiosa presencia del universo, que está lleno de un poder misterioso”.
Página recomendada:
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En la actualidad continúa trabajando en su estudio de Tokio. Por las noches acude a la clínica considerada como su domicilio habitual.
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